sábado, 26 de enero de 2013

Las cosas que importan






Frente a muchos de mis anhelos cumplidos he quedado sin palabras en las manos, pero no en la cabeza ni en el corazón. Ha sido tal la magnitud de las cosas que últimamente me han sucedido, que con trabajos he podido escribir algo al respecto. Finalmente llega a mis manos, un evento, que bien valdría la pena escribir un libro y no sólo cuentos, relatos, anécdotas o poemas. Tal vez, todo eso, de alguna manera ha sido una especie de libro o compendio. Frente a las enormes páginas en blanco, me pregunto, ¿Qué es lo que verdaderamente valdría la pena contarte? ¿Será interesante simplemente hablar de los acontecimientos cotidianos? Nunca antes me lo había planteado. Antes sólo escribía de lo que me interesaba a mí, creaba realidades paralelas sobre cosas que escuchaba de otros, frases robadas como fuente de inspiración, historias mezcladas, etc. Sin preocuparme si realmente era algo que merecía ser escrito. Antes sólo me importaba mi juicio, mi deseo, mi anhelo. Ahora, algo ha cambiado drásticamente y oscilo entre las historias verdaderamente fantasiosas que permiten todas las libertades del mundo y la mágica sensación de sentirte por primera vez. Y no estoy hablando de sentirte en mi corazón o como fuerza gobernante de mis anhelos. Me refiero a sentirte de verdad con la yema de mis dedos y descubrir como vas trasformando todo en mi vida. Esas son las cosas sobre las que quisiera escribir, sobre las quisiera escribirte